La Avenida del Barón de Cárcer, eje fronterizo entre los barrios del Mercat y de Velluters, es consecuencia de la demolición de una encrucijada de callejuelas en la década de los 40 del siglo pasado. Entre ellas, desaparecieron parte de la Calle de Nuestra Señora de Gracia y de una Calle de Quevedo donde se habían asentado prostíbulos que provenían del antiguo Barrio de Pescadores. Desaparecieron totalmente entonces la Plaza de Pellicers, la de Falcons, la de Pertusa, la Calle de la Jabonería Nueva, la Plaza del Molino de Na Robella y los añejos Pasajes de San Juan y de Monistrol. Discurre por tanto entre la Plaza de la Ciudad de Brujas y la Plaza de San Agustín y se llamó Avenida del Oeste pues era esta la orientación que tenía. En su proyecto inicial, afortunadamente no realizado, se prolongaría más allá de la Plaza Ciudad de Brujas y llegaría hasta el Puente de San José arrasando parte de las calles más entrañables del Barrio del Carmen. Respecto al personaje que motiva la rotulación diremos que Joaquín Manglano Cucaló de Montull fue Barón de Carcer desde el 1916 y fue Alcalde de Valencia al terminar la Guerra Civil, impulsando la apertura del primer tramo de la Avenida del Oeste.