10 de octubre de 2014

La "Calle de En Llop" albergó la curiosa escultura del popular "nano".



La “Calle de En Llop”, desde la Calle de San Vicente Mártir hasta la Plaza del Ayuntamiento, recuerda a Teodoro Llop, padre del autor de una obra sobre la “Fábrica de Murs e Valls”. Por tanto hay que descartar la denominación “del lobo” que durante mucho tiempo se le vino dando y que hasta fue rotulada en la calle. Pero sin duda por lo que fue más conocida es por la existencia de una escultura grotesca de grandes proporciones que representaba a un hombre de espaldas y a la que se llamó el “Nano del carrer d´en Llop”. Su origen arranca de la animadversión de dos de las familias nobles de este entorno y que vamos a relatar. Lo cierto es que a esta calle daba la fachada lateral del palacio de los Castillo y la posterior de la casa solariega de Lorenzo Merita. Entre ambos hubo algún conflicto por asuntos de servidumbre de luces que no pasó a mayores y fueron designados para representar a Valencia en la jura en Madrid del que después sería el rey Carlos IV. Y a Francisco Castillo se le dio allí el título de marqués de Jura Real, hecho que ocasionó la ira de Lorenzo Merita. Por ello, “premió” a su vecino colocando esta grotesca figura que daba la espalda o las nalgas a la casa de su recién nombrado marqués. Fue en el año 1929 cuando finalmente se trasladó dicha figura a la finca de un propietario de La Cañada.