La calle de Zapateros, entre la
plaza de San Lorenzo y la calle de Serranos, nos trae a la memoria el primer
gremio que dispuso de casa propia desde el año 1369 y que incluía oratorio y
hospital para los pobres del oficio por lo que se llamó en tiempos “de la
Cofraría dels sabaters”. Tanta importancia tuvo que sus oficios religiosos en
honor de sus patrones San Crispín y San Crispiniano tuvieron indulgencias
papales. Esta ocuparía parte del Palacio de los Montoliu, cuya fachada
principal daba a la plaza de Cisneros pero la trasera a esta calle de
Zapateros. Por eso en esta parte se albergaron unas caballerizas conocidas como
“Cochera de Regües” destinado s los coches tradicionales para familias
pudientes. Modernamente, se derribó para construir un aparcamiento de tres
plantas. Casi en la calle de Serranos encontramos la fachada lateral del
antiguo convento de los Padres Camilos, que fue leprosería, hoy destinado a la
Dirección General de la Mujer. Entre los habitantes ilustres de esta calle
destaca en el S.XVII el notable pintor de bodegones Tomás Yepes.