15 de diciembre de 2016

La "calle del Repeso" muestra el lugar donde el mustasaf verificaba el peso de las mercancías.

La calle del Repeso discurre entre la calle de Numancia y la calle de los Cambios. Su curioso rótulo se debe a la labor que hacía el funcionario llamado “almotacén” o “mustasaf”, encargado de verificar las reclamaciones que se producían en las compras y en las que había algún conflicto sobre la exactitud de sus pesos o medidas. Este colocaba una piedra sobre una de las paredes de la iglesia de Santa Catalina y era el soporte oficial sobre el que se realizaba el pesaje para comprobar si era correcto en relación a lo pagado. Anteriormente se llamó “del consulat” por alojar el conocido tribunal del Consolat del Mar, primer tribunal de Derecho Mercantil y de la Navegación de España, que otorgara Pedro el Ceremonioso y que con la construcción de la Lonja se ubicó allí.