La muy antigua Calle de la Leña recorre la parte trasera o fachada posterior de la Basílica de la Virgen de los Desamparados y que hoy recae a los restos museizados de la Almoina, verdadero centro de la ciudad romana de Valentia como intersección de su “cardus” y su “decumanus”. Es por ello por lo que hoy forma parte de la actual Plaza de la Almoina. Desde la Calle del Almudín hasta el Pasaje de Emilio María Aparicio Olmos, consta en los antiguos relatos de los martirios de San Vicente que uno de ellos se le aplicó en este entorno ya que aquí se encontraba el Foro.