En la Calle de Calatrava estuvo la casa conventual e iglesia de la antigua Orden de Caballeros de Calatrava que tuvo una gran representación en el ejército del Rey Jaime I el Conquistador. En esta calle nació el conocido con el sobrenombre de Erudito Orellana que redactó el origen de calles, plazas y edificios de Valencia en tres volúmenes de su puño y letra que fueron realizados en el siglo XVIII. También se llamó de Cesteros y de Mosén Beneyto. Se alarga desde la Calle Cadirers a la de Caballeros.